Mi Doble Tonto

Kevedd

Vuelvo a aclarar, soy la misma autora de este fanfic que se encuentra en "Mundo Yaoi", por cualquier cosa.

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Se encontraba un Doble D de diecisiete años en el baño de la escuela limpiándose la sangre que brotaba de su nariz, también tenía el labio partido con el ojo izquierdo morado. Las lágrimas comenzaban a brotar de los ojos de Edd, aunque cada vez que salían Doble D las secaba al instante. Estaba seguro que en cualquier momento su novio podría aparerse y si le veía llorando su instinto asesino despertaría solo para vengar a "su Edd". La puerta del baño se abrió.

-¡¿Quién fue?!-preguntó un muchacho de la misma edad que Edd con una gorra hacia atrás, se veía bastante furioso. El chico se acercó hacia Edd.

-Ke…Kevin… Nadie-forzó una sonrisa para decirle que estaba bien y que no se preocupara-. Estoy bien, solo son golpes.

-¡¿Solo golpes?! Sí, claro, y por eso estas a punto de llorar, ¿no?-Kevin tomó a Doble D de su nuca atrayéndolo hacia él, puso la cabeza de este en su pecho de forma tierna y protectoramente-. ¿Quién fue, Edd?

-Los chicos del equipo de futbol… Pero olvídalo
-¿Qué lo olvide?-Edd fue separado delicadamente-. ¡Mírate! ¡Mi novio fue golpeado!...-Kevin suspiro para tranquilizarse un poco y no gritarle o comportarse forma grosera con Doble D-. Espera en mi casa.

Después de decir eso, Kevin besó la frente de Edd y se dirigió a los vestidores. Al llegar, le dio una paliza a todos los del equipo.

-¡Eso es por golpear a MI tonto! ¡Si vuelven a tocarle no volverán a ver la luz del día!

Kevin se dirigió a su casa encontrándose con Doble D sentado en el sillón, ya no tenía sangre en la nariz, ya solo había una rayita roja en su labio inferior, y tenía un ojo morado menos hinchado que anteriormente, tenía una bolsa de hielo envuelto en una toalla sobre su ojo para intentar desinflamarlo, Edd miró con su ojo sano a Kevin, se notaba preocupado.

-¿Te hicieron algo?-preguntó mientras Kevin se sentaba a su lado.

-No, yo a ellos-sonrió besando los suaves labios de Edd para separarse en cuanto el oxigeno se hizo presente-. Nadie volverá a hacerte daño ¿okey?-volvió a besarle dulcemente-. Haces que me preocupe… Eres un doble tonto-Kevin abrazó a Doble D con cuidado de no quitar la bolsa de hielo. Besó su frente-. Pero eres mi doble tonto.

FIN